Frenos
- Efra Cortazar
- 29 jul 2020
- 3 Min. de lectura

La incapacidad de avanzar deriva de varios factores que me gustaria analizar de manera profunda...
ºMiedo. La mayoría de las personas pretende no tenerlo y simplemente lo ignora de manera tajante sin darse cuenta de que al hacer eso lo único que logra es colocar un peso encima de sus hombros del cual no quiere hacerse responsable, de esta manera cuando intenta hacer algo el subconsciente lo traiciona y termina por echar a la borda todo el trabajo previo a iniciar con cualquier proyecto... El segundo tipo de personas son quienes saben que el miedo está ahí, lo observan y deciden pasar el tiempo reclamando y reclamandose a si mismos por tener miedo, viven en la negación y en un estado de víctima constante que es lo que impide que logren los resultados que tanto desean. El último grupo de personas sabe que el miedo está ahí, lo aceptan, lo comprenden y deciden avanzar a pesar de todo, incluso tienen la capacidad de volver al miedo en un gran aliado, logran apalancarse de un concepto del que otros sólo se quejan o deciden ignorar... esto no sé debe más que a su gran inteligencia emocional y a su dureza mental, tratan de permanecer conscientes la mayor parte del tiempo posible y esto les permite capturar pensamientos y acciones erroneas en tiempo y forma para evitar caer.
Comodidad. Cuando tienes que realizar una actividad que está fuera de tu radar de confort tienes que gastar más energía y eso a tu cerebro no le agrada... entonces decides continuar con lo mismo de siempre.
ºPerfeccionismo. Deseas que todo sea perfecto para poder comenzar, piensas que necesitas hasta el último detalles listo para dar el siguiente paso, y no digo que no sea bueno planear, pero cuando de avanzar se trata, el perfeccionismo es sólo una trampa que impide a muchos iniciar.
ºMetas claras. Cuando no tienes completamente claro a donde ir, es muy probable que te cueste más trabajo llegar. Existen rutas para casi cualquier objetivo que deseas, el problema aquí es que ni tu mismo tienes claridad de a donde quieres llegar.
ºAsuntos pendientes. La mayoría de nosotros siempre tenemos la costumbre de dejar algo para más tarde, eso incluye sanar una relación, terminar un proyecto de vida etc... y lo que no nos damos cuenta es que esos pendientes están absorbiendo buena parte de nuestra energía y eso nos impide avanzar. No ignores los asuntos importantes de tu vida, atiende y termina lo que te haga falta.
ºEnfoque. Supongamos que ya sabes lo que quieres, pues ahora el problema es tu falta de enfoque en los resultados y el proceso... una de las cosas más sencillas cuando no estás completamente comprometido con algo es perder el enfoque de lo que quieres, por eso dependiendo tu meta, lo más recomendable es cuidar tu entorno para cuidar tus pensamientos, si quieres algo que nadie o muy pocos desean, entonces tendrás que esforzarte más. Recuerda siempre "una cosa a la vez".
ºMotivación. Algo que te impide conseguir lo que realmente deseas es tener un buen motivo para hacerlo. Puedes tener todas las herramientas y recursos necesarios para llevar a cabo tus metas pero si no tienes un motivo lo suficientemente fuerte para pararte del sillón y hacerlo, es muy poco probable que lo hagas. . . . . .
P1"
Efra Cortazar.
Comments